Dreadnoughtus schrani, un dinosaurio de dos pisos de altura, con una cola casi tan larga como la de un autobús urbano y un peso que supera las 65 toneladas, se ha convertido en uno de los animales terrestres más grandes jamás conocidos.
Los restos sorprendentemente completos y bien conservados del Dreadnoughtus, excavados en Argentina entre 2005 y 2009, prometen aportar conocimientos sin precedentes sobre la vida de los dinosaurios gigantes.
A diferencia de muchos otros dinosaurios masivos conocidos a partir de restos fragmentarios, Dreadnoughtus ofrece una gran oportunidad para comprender las relaciones entre los dinosaurios gigantes, sus tasas de crecimiento y la biomecánica de sus inmensos cuerpos.
La integridad del espécimen permite a los científicos profundizar en las complejidades de cómo estas criaturas tan cómodas navegaban en sus entornos, ofreciendo una clave para interpretar otros especímenes más fragmentarios.
El descubrimiento, publicado en Scientific Reports, marca un hito importante en la paleontología, ya que proporciona una gran cantidad de información sobre la biología y el comportamiento de los dinosaurios gigantes.
El paleontólogo Michael D’Emic de la Universidad Stony Brook enfatiza la importancia de este hallazgo, señalando que los vislumbres sobre las vidas de los dinosaurios gigantes a menudo han sido fugaces, y Dreadnoughtus sirve como pieza clave para comprender otros especímenes de dinosaurios grandes.
La estimación precisa del peso del Dreadnoughtus es un testimonio de la integridad de sus restos, lo que permite a los científicos realizar cálculos muy precisos.
El enorme tamaño del dinosaurio, junto con su preservación excepcional, lo posiciona como un activo valioso para desentrañar los misterios del pasado antiguo de la Tierra y la impresionante diversidad de vida que una vez vagaba por el planeta.